ID {Furukawa Kazuo} || Institute von Finisterre

{Historia}

Hijo de Japoneses pero nacido en Alemania, con ambas nacionalidades y pudiendo hablar dos idiomas, Kazuo siempre fue un niño muy listo, fue consentido por su madre hasta que mató a sus padres en un arranque de ira descontrolado después de un berrinche sin sentido y quedó completamente traumatizado, por lo que se volvió distante con todos.

Se crio en un orfanato, siempre distante, pero mostrando que era más inteligente que todos, pero muchas veces hacía cosas inexplicables que solo lograba asustar a todos provocando que lo rechazaran y marginaran aún más por lo que creció siendo mas aislado y siendo principalmente ignorado, encerrado incluso por los demás niños. Cuando cumplió 12 años, los jóvenes que crecieron con él, sabiendo que no era normal, le quemaron totalmente todas sus pocas pertenencias que logró tener, lo que hizo que su ira se incrementara a tal grado que perdió completamente control de sus poderes, destruyendo completamente el orfanato, matando sin querer a todos los que estaban a su alrededor.

En ese momento, fue encerrado en una correccional de menores, sin embargo, un hombre, que para ese entonces era un hombre mayor, con una mirada sumamente penetrante y mágica, fue a visitarle y a sacarle de ese horrendo lugar, diciéndole que sus poderes no eran una maldición, si no eran una bendición de Dios, un Dios que acababa de mandar a sus más grandes guerreros y ángeles para purgar al mundo del pecado, como acababa de hacer, sin embargo, esas palabras no lograrían llegar al corazón traumatizado de Kazuo.

Estuvo un año en el Instituto von Christ, bajo una supervisión constante, pero no pudo adecuarse nunca a ello porque el ambiente tan religioso que vivía, le recordaba tanto al orfanato que muchas veces escapaba al bosque oscuro, y fue cuando conoció a Diederich. Un hombre que le dejó totalmente anonadado, inclusive, totalmente frío, sin siquiera poder defenderse, sin siquiera poder hacer nada y cayó a sus pies, hincado, y comenzó a llorar.

No supo exactamente cómo o el porqué, Diederrich no le mató aquella vez, simplemente supo que desde ese día, le fue fiel en cuerpo y alma al Director, Desde siendo uno de los alumnos más ejemplares, siempre estando bajo el abrigo oscuro de “Hades” hasta cuando se graduara, e inmediatamente, pediría el quedarse en Finisterre y ser profesor, lo que ha estado haciendo actualmente, buscando siempre el ser la mano derecha de Diederich.
 

{Psicología}

Calmado y bastante frío algunas veces. Nunca se le verá alterarse a ninguna circunstancia, aun cuando sabe que puede ser de vida o muerte. Aprendió a ser completamente cerrado y enmascara su desconfianza de dos maneras, con la gente cercana o alumnado, con una sonrisa amable e inclusive con una tonalidad de voz suave y amable, con los desconocidos y principalmente con los provenientes de von Christ, frío y cortante.

Es muy inteligente y calculador, suele siempre pensar bien las cosas antes de hacerlas, sin embargo eso no le impide el actuar de forma rápida en una cuestión que requiera de acción inmediata. Kazuo es poderoso sin embargo no hace alarde de ello y siempre intentará que todos los alumnos que él crea que tengan potencial, los instruye de la mejor forma que él considera.

Tiene la facilidad de leer muy bien a las personas sin necesidad de leer su mente ya que se para él, cuando era menor, tuvo que aprender a hacerlo para lograr sobrevivir al orfanato. Nunca habla de si mismo, jamás responderá una pregunta de su historia, por lo que él prefiere quedarse callado con una sonrisa o simplemente dar la vuelta a la pregunta de manera amable o cortante, dependiendo la compañía.

Detesta a Christ por los recuerdos del orfanato, él cree ciegamente que personas con la ideología de Von Christ, son peligrosas, por lo que si es necesario exterminarlos, lo hará.

Confía en Diederich y lo admira ciegamente, siempre buscará el poder serle de utilidad.